LA IMPORTANCIA DE LA MÚSICA






EL PODER DE LA MÚSICA

Y LAS INTELIGENCIAS MÚLTIPLES



¿A quién no le gusta la música? La música no entiende de culturas, ni de edades, ni de sexos… La música es universal. Sirve para bailar, para concentrarnos, para pasear, para enamorarnos, para alegrarnos, para entristecernos. La música no entiende de fronteras. La música nos gusta a todos, sin embargo, según la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, algunos gozan de mayor inteligencia musical.

¿Qué es la Inteligencia Musical?


La Inteligencia Musical puede definirse como toda aquella habilidad relacionada con la percepción, discriminación, transformación y expresión musical. Cada vez que pensamos en términos de sonidos, ritmos y melodías estamos haciendo uso de este tipo de inteligencia. Este tipo de inteligencia también nos permite expresar emociones y sentimientos sin palabras, sólo a través de sonidos y melodías.

“El poder terapéutico de la música es importantísimo, y tiene un efecto de relajación de los movimientos que resultaría imposible de no mediar su actuación”.
-Oliver Sacks-

El físico Philip Ball afirma que la música va más allá de lo puramente cognitivo. Según el autor, la música “puede afectar al sistema inmunológico, incrementando los niveles de proteínas que combaten las infecciones microbianas”.

El etnomusicólogo John Blacking asegura que “el desarrollo de los sentidos y la educación de las emociones a través del arte no son sólo opciones deseables, sino elecciones esenciales para la acción equilibrada y el uso efectivo del intelecto”.

“La música da alma al universo, alas a la mente, vuelos a la imaginación, consuelo a la tristeza y vida y alegría a todas las cosas”.
-Platón-

La música no es un elemento estático, sino que se trata de un arte en movimiento. La forma puede ser diferente, pero el objetivo siempre es el mismo: la expresión mediante ritmos, melodías o cantos de sentimientos, emociones y pensamientos.

El por qué y para qué se debe aprender música, la respuesta a estas preguntas que nos hacemos, la encontramos en la cercana relación de la música con otras competencias intelectuales. El contacto temprano con la música, ofrece al niño/a mayores oportunidades de fortalecer capacidades como: la escucha, la concentración, la abstracción, la expresión, la autoestima, la responsabilidad, la disciplina, actitud creativa, etc.)


Inteligencias Múltiples y Percusión Corporal

¿Que áreas del cerebro estamos conectando con la percusión corporal?.¿ Qué nos hace la música?. ¿Cuando hacemos música en grupo y nos movemos se genera un sentimiento de pertenencia. Así, Qué nos pasa cuando suena un temazo y lo compartimos…?

La música está considerada entre los elementos que causan más placer en la vida. Libera dopamina en el cerebro como también lo hacen la comida, el sexo y las drogas. Estímulos que dependen del sistema límbico, formado por estructuras del cerebro que gestionan respuestas fisiológicas ante estímulos emocionales.

Estudios de neuroimagen enseñan que tanto al escuchar como al hacer música se estimulan conexiones en una amplia zona de regiones cerebrales normalmente involucradas en la emoción, la recompensa, la cognición, la sensación y el movimiento. Desde la musicoterapia y la neurociencia se estudia como las nuevas terapias basadas en la música pueden favorecer nuevas conexiones neuronales…con fantásticos resultados en el trabajo de memoria (como afectados de alzheimer), de interrelación, de integración, etc…

Con la música y el ritmo desde un punto de vista del aprendizaje, también estamos ejercitando la memoria auditiva, aprendiendo estructuras “cuadradas” de 4 por 4, ¾…estructuras lógicas que se repiten y con las que repetimos un orden, asentamos estructuras, entendemos la matemática musical y asociamos los silencios y las figuras musicales al orden temporal que lleva implícito seguir un ritmo…

Ahí estamos utilizando el hemisferio izquierdo, el de la razón, el que calcula, el lógico….
Y de repente la emoción que lleva implícita la música nos conecta con el otro hemisferio derecho, con el sentido musical, el creativo, la intuición, los símbolos…



A parte del poder de la música…¿Qué pasa con el movimiento?

Se sabe y está demostrado que cuando nos movemos y lo pasamos bien, cuando realizamos ejercicio, bailamos… además de oxigenarnos segregamos endorfina, esa hormona con la que nos sentimos tan bien. Es indivisible e interesantísimo que la percusión corporal conlleve hacer un buen trabajo de danza, de control corporal, de investigación de las posibilidades de movimiento y apertura y expresión de cada cuerpo, eso que llaman inteligencia corporal o cinestésica.

El control del espacio y la propio-cepción; es decir la percepción que tenemos de uno mismo y como entreno a mis propioceptores me ayuda a reconocer y controlar mi cuerpo. Registrar como respiro, como segmento mi cuerpo, como expreso, como me habito…
La escucha corporal, la mirada abierta etc. nos proporciona una inteligencia espacial complementaria a la vez con la lógico-matemática que estamos trabajando con las estructuras rítmicas y del lenguaje.




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